Que los jóvenes, en nuestra sociedad, usan las TIC es algo evidente. A diario y en muchas de las tareas habituales que realizan, las Tecnologías de la Información y la Comunicación son un elemento primordial. De vez en cuando hasta vemos noticias que nos hablan del abuso de las mismas e incluso de la dependencia a las TIC como una nueva adicción.
Los elementos principales con los que cuentan los jóvenes para utilizar las TIC son, habitualmente, el ordenador y el móvil. También se unen a estos otros dispositivos como las tablets. Con el aumento de la red móvil y las tarifas de datos cada vez rápidas, debido al 4G, y con mayor número de gigas disponibles, el consumo a través de los smartphones se ha visto incrementado mucho en los últimos años.
¿Para que utilizan las TIC los y las jóvenes?
En lo que se refiere a los usos, la búsqueda de información y el uso de internet para divertirse están entre las actividades más destacadas entre los jóvenes cuando utilizan internet, segun el estudio Jóvenes en la Red un Selfie realizado por FAD y el instituto Reina Sofía. Buscar información de otras personas, compartir información y opiniones, seguir determinadas webs o jugar en la red son otras de las utilidades que los jóvenes españoles ven a internet.
Más allá de lo evaluado cuantitavemente por este estudio, centrado en las redes sociales, hablaríamos del uso de las TIC como herramienta para la comunicación, con especial relevancia del WhatsApp. Y, por supuesto, como educadores, no podemos obviar el rol fundamental en la socialización que tienen las diferentes aplicaciones y que, mal utilizadas, pueden dar lugar a problemas y conflictos como el cyberbullying.
Sin embargo, ¿ saben mucho de las TIC?
Es frecuente al hablar de TIC escuchar el término de alfabetización digital para referirnos al conocimiento de las Tecnologías de la Información y la Comunicación. Junto a éste, encontramos también otro más, el de nativos digitales, que engloba a aquellas personas que han nacido en una época en la que las TIC estaban ya más desarrolladas y extendidas entre la población.
Los actuales jóvenes, nacidos a finales de los 80 y durante los 90, entrarían dentro de este concepto de nativos digitales y por ello, muchas veces, presuponemos un conocimiento y un manejo adecuado de estas herramientas. Pero esto no es del todo cierto, ya que no todos los jóvenes son iguales y no tienen la misma disposición, acceso y control de las TIC.
Además, entre muchos de quienes que las utilizan frecuentemente se ha observado un uso superficial. Por mi experiencia formando a jóvenes en estas herramientas, he podido ver que si conocen las posibilidades y opciones que les ofrecen las más habituales en su día a día, especialmente las aplicaciones de comunicación para el móvil y las redes sociales que más éxito cosechan entre la juventud. Sin embargo, cuando nos trasladamos a otras herramientas diferentes, su conocimiento disminuye bastante.
Sobre los peligros y usos fraudulentos de las mismas, desde mi experiencia, he podido comprobar que son más o menos conscientes en temas como el ciberacoso o la privacidad, al menos en la parte teórica. La mayoría ha visto noticias o conoce de cerca algún caso. Sin embargo, se sorprenden al ver los resultados de su exposición personal en la red. Y es que, una actividad muy sencilla que me gusta realizar en estas sesiones, es la búsqueda de su nombre y apellidos a través de Google. Por regla general, cuando posteriormente comentamos la prueba, muchas de las personas participantes no imaginaban que iban a obtener esos resultados. Suelen seguir a la dinámica acciones como el aumento de la privacidad de sus perfiles en las redes.
Considero que, a pesar de estar entre nativos digitales, es conveniente realizar formación específica entre los jóvenes de uso de las TIC y, principalmente, de las redes sociales y aplicaciones de comunicación para fomentar un uso responsable de las mismas.
Además, creo necesaria una formación en herramientas TIC diferentes a las que usan habitualmente y pueden ser de mucha utilidad para su día a día. Me refiero aquí a un amplio campo de posibilidades: desde tareas más sencillas como aprender a realizar correctamente y delimitar las búsquedas en internet, hasta tareas más complicadas como el uso de aplicaciones concretas que puedan servir en sus estudios a la hora de realizar una presentación, esquemas, mejorar sus trabajos...
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